Dos escaleras existen
en el fondo de mi Ser:
si por una al descender
me voy acercando al suelo,
la otra me indica el cielo;
entre ambas he de escoger.
Al final de la primera
todo es ya serenidad:
se terminó la ansiedad
pero también la esperanza,
y en irrimediable alianza,
con patetica verdad,
para siempre se confunden
el helado pensamiento
y la nada...un desaliento
todo el cerebro invadido;
el ser no tiene sentido
es sólo un experimento
de la cambiante materia
Ay suelo desolador!
¿Porqué congelé mi ardor,
y descendí la escalera?
Si por la otra yo ascendiera
tal vez me fuese mejor
Es más dificil subir;
el corazón se sofoca,
y en cada peldaño toca
espacios que son locura...
Así se llega a la altura,
quisiera volverme loca!

(Frida Kahlo - copiado en la casa azul de Coyoacán)