venerdì 13 ottobre 2006


O dulces fueron las horas cuando colmadas de bromeante alegria
Yo abrí las fiestas con bailes y cantos;
Cuando fresca de la fuente y clara como el dia
Mi alegría trasbordó y huío alrededor.
Vino! Ven y trae el vino que me de alegría,
Amigo de mi corazón! Ven y brinda a mi!
Vino! Hasta que los sueños de juventud vuelvan a ser cercanos,
Porque deben de dejarme, dime tu, porque?
Volved dulces horas!
Permitid que yo vuelva a ver una vez solamente,
Vuestras leves aereas formas de alegría e incanto;
Venid, conceded a un viejo amigo que el alegre vaso va colmando
Un saludo cuando os despedís y una sonrisa cuando os vayais alejando.
Vino! Ven y trae vino...
No se olvidaros, la esperanza queda mía:
He aqui salud en la sangre y en el vino la mágia;
Y aun pase muy rápido, el sol otoñal
Es más dulce y precioso del sol de junio.
Vino! Ven y trae el vino...

(Oh sweet were the hours - Ludwig Van Beethoven)